La contaminación del río Acelhuate no es una novedad. Sin embargo, el presidente Nayib Bukele descubrió este 4 de julio el delito de contaminación ambiental en la quebrada El Piro, tributaria de la cuenca Acelhuate. Ese delito es penado con cuatro a ocho años de prisión, según el artículo 255 del Código Penal. Con el tuit presidencial, de inmediato se activaron las cuadrillas de muestreo del agua contaminada, encabezadas por el ministro de Medio Ambiente, Fernando López. “Hemos llegado específicamente a la caja de aguas negras del Plan de La Laguna a dónde se estaba originando la contaminación”, explicó después del recorrido de este 4 de julio el ministro Fernando López.
Para el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) tampoco es desconocida la contaminación de los ríos tributarios del Acelhuate. En 2016, contrató los servicios de Sustainable Development Alternative, S.A. de CV. para levantar el catastro de las empresas que descargan sus aguas a la quebrada El Piro. La MalaYerba tiene los documentos finales de esa consultoría. La cual registró que en El Piro hay 20 empresas que descargan sus aguas residuales especiales.
Las 20 empresas son: Laboratorio Teramed, S. A de C.V, Lactolac, S.A de C.V, Distribuidora Europea, S.A de C.V, Laboratorio Vijosa, S.A de C.V, Bimbo de El Salvador, S.A de C.V, Si – Ham (de Industrias Bendek, S. A de C.V), Laboratorios Suizos, S.A de C.V, Cherry, S.A de C.V, Industrias Merlet, S.A de C.V, Harisa, S.A de C.V, Laboratorio Marceli, S.A de C.V, Crio Inversiones, S.A de C.V, La Sultana, S.A de C.V, Techno Screen, S.A de C.V, St. Jack’s S.A. de C.V, Central Dulcera, S.A de C.V, Central Dulcera, S.A de C.V, Carvajal Empaques, S.A de C.V, Parque Industrial El Progreso, S.A de C.V (Walmart), Polifyl, S.A de C.V, Sanchez Centroamérica, S.A de C.V.
De las 20 empresas el 90 % descargan sus aguas a través del alcantarillado de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA). Además, el equipo consultor determinó que el 60 % de las empresas generaban un riesgo ambiental alto, es decir que, “carecen de controles ambientales dentro del proceso de producción, para prevenir la contaminación del recurso hídrico”, detalla el informe.
De las 20 empresas, 11 no cumplían con los parámetros que establece la norma salvadoreña de aguas residuales. Es decir, que el Ministerio de Medio Ambiente sabe desde 2016 que esas 11 empresas contaminan la quebrada El Piro. En una solicitud de información hecha por MalaYerba, el MARN informó que entre 2016 y 2021, la institución abrió 46 procesos administrativos —mecanismos legales que tiene el MARN para evitar daños ambientales—. Ninguno de los procesos fue en contra de las 11 empresas contaminadoras de El Piro.
En el operativo de este 4 de julio, el director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, confirmó la detención en “flagrancia” de Antonio Germán Martínez Rodríguez, de 77 años. De quien las autoridades no precisaron para qué empresa labora.
Falta de controles
Toda esta contaminación de ríos ocurre frente a un Ministerio de Medio Ambiente con presupuesto reducido y que hasta octubre de 2021, contaba con 14 personas para realizar todas las inspecciones ambientales requeridas del país; una Fiscalía Ambiental pasiva frente a los contaminadores, y una administradora estatal de aguas, ANDA, enfocada en la distribución de agua potable y que relega el saneamiento ambiental, un deber que se le adjudicó desde su creación en 1961.
La impunidad con la que actúan las empresas se debe a que el Ministerio de Medio Ambiente no cumple con las auditorías ambientales que le ordenan los artículos 27 de Ley de Medio Ambiente y 36A del Reglamento General de Medio Ambiente. En el Anuario Estadístico del MARN, registró en 2017 un total de 280 auditorías ambientales realizadas; en 2019 fueron 181.
A la falta de auditorías se le suma que entre 2021 y 2022, este ministerio presentó una reducción del 6.45 % de su presupuesto: pasó de tener 14 millones 893 mil dólares a 13 millones 088 mil. Una de las áreas más afectadas es la partida destinada para la reducción o eliminación de fuentes de contaminación, que prácticamente desaparece con la eliminación de 100 mil dólares que se destinaban para eso. También, la Gerencia de Evaluación y Cumplimiento, encargada de las auditorías ambientales, redujo su presupuesto 27 mil 141 dólares.
Al bajo presupuesto del MARN se le suma el poco personal. En octubre de 2021, la Gerencia de Cumplimiento Ambiental, que se ocupa de las auditorías ambientales para todo el país, solo contaba con 14 personas.
