Obras del Aeropuerto del Pacífico iniciaron antes del otorgamiento del permiso ambiental

Los habitantes de Condadillo y Flor de Mangle denunciaron que maquinaria del Ministerio de Obras Públicas empezó la perforación de terrenos a finales de febrero. Medio Ambiente dio luz verde al megaproyecto hasta el 21 de marzo. Ahora, CEPA tiene la licencia para modificar el paso natural de, “al menos, ocho manantiales”, según la resolución del MARN.


“Aprovecho esta ocasión para destacar las acciones de nuestro Gobierno, bajo el liderazgo del Presidente Nayib Bukele, para velar por la protección y la gestión sostenible del recurso hídrico a nivel nacional”, dijo el ministro de Medio Ambiente, Fernando López, durante su intervención en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el agua. El evento se realizó el 22 de marzo, cuando se conmemora el Día Internacional del Agua. Un día antes, el 21 de marzo, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) emitió el permiso ambiental para el megaproyecto insignia del presidente Bukele que modificará el cauce natural de cuatro ríos y, al menos, siete quebradas en La Unión: el Aeropuerto del Pacífico.

El proyecto de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) fue rechazado de entrada por Medio Ambiente porque abarca una pequeña porción del Área Protegida Manglar El Tamarindo; además, la zonificación vigente al momento de la solicitud del permiso —la zonificación de la franja costero marino— clasificaba la mayor parte de las tierras de Condadillo y Flor de Mangle, en La Unión, como áreas de conservación. Para continuar con el proceso de evaluación ambiental del aeropuerto y otros más en La Unión, el ministro López lanzó una nueva zonificación de La Unión, que volvió urbanizable el área de influencia del Aeropuerto del Pacífico.

Captura de pantalla de la resolución de los TDR para el estudio de impacto ambiental del Aeropuerto del Pacífico.

Aún con la nueva zonificacion, el MARN recomendó a la autoridad portuaria cambiar la ubicación de la construcción, pues son tierras inundables en las que circulan varios afluentes que alimentan el manglar anexo. Algo que CEPA ignoró, bajo el argumento de que los costos de la construcción incrementarían. Así fue como mantuvo el diseño en el lugar inicial. Y así se aprobó el permiso ambiental.

A la MalaYerba llegaron las primeras denuncias de obras para el aeropuerto a finales de febrero e inicios de marzo, es decir, casi un mes antes de la obtención del permiso ambiental. Los habitantes de Condadillo y Flor de Mangle, en La Unión, contaron sobre la perforación que: “Andan escarbando, dicen que el agua tiene que estar a 14 metros para que no afecte al aeropuerto, y a nueve metros ya tienen agua. Ahora resulta que pasarán el aeropuerto más arriba del cantón”, dijo un habitante de Condadillo que prefiere el anonimato para evitar represalias.

En Flor de Mangle la maquinaria inició la exploración de terrenos que no han sido negociados entre CEPA y los propietarios. Por ejemplo, Santo Eduviges, agricultor afectado por la construcción del aeropuerto, denunció públicamente que trabajadores con camisetas amarillas y el distintivo del Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT) estaban ingresando máquinas retroexcavadoras a los terrenos de su hijo “sin autorización”. «Ellos (CEPA y el MOPT) están violando las leyes. Porque meterse a una propiedad sin permiso y sin autorización del dueño de la propiedad es violentar las leyes, los estatutos y violar nuestros derechos», dijo Eduviges.

El agricultor lamentó que el Gobierno del presidente Nayib Bukele les esté quitando sus propiedades y dejándoles sin tierras para trabajar. Santos Eduviges agregó que  algunos habitantes que vendieron sus terrenos aún no han recibido el pago por sus propiedades. 

La fuente de Condadillo dijo que los habitantes de ese caserío tampoco han recibido los $8,000 por manzana negociados con CEPA. “Habían dado seis meses para pagar y no han cumplido”, reclamó.

Información falsa

La MalaYerba ha registrado información falsa sobre la construcción de este aeropuerto calificado por expertos como innecesario para un país pequeño como El Salvador. Por ejemplo, el 8 de febrero, el presidente de CEPA, Federico Anliker, mintió en una entrevista televisiva al asegurar que “los permisos medioambientales ya están”. Este medio solicitó información oficial al Ministerio de Medio Ambiente, y hasta el 14 de febrero no había sido otorgado el permiso. Es más, la resolución de la licencia estuvo disponible hasta el 22 de marzo en la plataforma del MARN. 

Otra mentira que se registra, pero en el permiso ambiental, es que según el documento firmado por el ministro López, durante los 10 días de la consulta pública del estudio de impacto ambiental “no hubo expresiones de afectación”, por lo que “no se requirió realizar el proceso de ponderación de resultados según lo establecido en el artículo 25 literal C de la Ley de Medio Ambiente”, se lee en la resolución con fecha 21 de marzo de 2023.

Sin embargo, la misma plataforma web registra una observación recibida en la consulta pública.

Captura de pantalla del sitio web del MARN

El nuevo aeropuerto

Según el permiso ambiental, el nuevo aeropuerto tendrá una pista de 3,120 metros de longitud y 280 metros de ancho; nueve plataformas de estacionamiento para aeronaves tipo A330-200. La obra, además, incluye: torre de control de 40 metros de altura, un faro, edificios de almacenamiento, central eléctrica, bodega y gestión de residuos, planta de tratamiento de aguas residuales ordinarias; 8 tanques de combustibles, de los cuales, siete tendrán 225 metros cúbicos y uno aproximadamente 95,000 metros cúbicos. Para todo eso, entre otras obras, se descapotará un total de un millón 953 mil 968 metros cuadrados, es decir, dos veces el tamaño conjunto de los lagos de Ilopango y Coatepeque.

El Aeropuerto del Pacífico afectará un corredor biológico importante para la Lora Nuca Amarilla.

Para el Aeropuerto del Pacífico, una de las promesas de campaña del presidente Bukele, el MARN aprobó obras subterráneas como nueve filtrantes y el “encauzamiento de, al menos, ocho manantiales afectados por la terracería”, detalla el permiso. Esas fuentes de agua descargan en el río Managuara y otros cauces que drenan hasta el estero El Tamarindo. También, se incluyen sistemas de laminación —una especie de dique que controla la cantidad de agua que llueve— en los ríos Managuara, Guamas y Los Monos. 

“Todo el daño que se va hacer en cuestiones de árboles, en los manglares, toda la contaminación que va a causar, todos los animalitos afectados, todas las especies, las aves, y los mantos acuíferos. Es un daño irreparable el que va a haber”, dijo la fuente de Condadillo. 

Elmer Martínez, presidente de la Cooperativa Flor de Mangle, dice que el MARN se “equivocó” al dar el permiso de ubicación y construcción del proyecto gubernamental cerca de un área protegida. «Ellos (MARN) debieron cuidar los bosques y el manglar, y no lo están haciendo», lamentó Martínez.

El permiso ambiental detalla que se impermeabilizarán 515, 450. 00 metros cuadrados, es decir, un 52. 5% del área del terreno; se talarán 7, 975 arbustos y 7, 394 árboles con una altura menor a los 20 centímetros, y 10, 620 con altura mayor a los 20 centímetros. La fianza ambiental impuesta para el megaproyecto es de $1, 046, 025.68 millones. Y está vigente por cinco años a partir del 9 de febrero de 2023.

Captura de pantalla del permiso ambiental

Más fondos

Al cierre de la sesión plenaria del 22 de marzo, la diputada de Nuevas Ideas, Alexia Rivas, introdujo una pieza de correspondencia a la Asamblea Legislativa, en donde el Ministerio de Hacienda solicita la modificación del presupuesto 2023 de CEPA, de manera que, se incorporen $5,879, 239 millones para continuar la fase de preconstrucción y el plan de reasentamiento del Aeropuerto del Pacífico.

En junio de 2022, la Asamblea Legislativa reformó la Ley de Presupuesto 2022 para incorporar $12 millones al ramo de Obras Públicas y Transporte, que servirían para ejecutar la primera fase del aeropuerto. Ese año, ya Hacienda había solicitado un monto de $6,3 millones para gastos previos de la construcción.

En 2022, la Asamblea Legislativa, también, aprobó con 67 votos del oficialismo y partidos aliados la Ley para la Construcción, Administración, Operación y Mantenimiento del Aeropuerto Internacional del Pacífico. El artículo 9 de esa ley establece que MARN podrá acelerar los trámites ambientales.